BLACK SABBATH: "Black Sabbath"

Hoy no es mi día. Tengo el día BLACK SABBATH, es decir, negro y oscuro, a la par que el cielo de esta ciudad. Cuando todo el mundo anda asfixiado por lo largo y ancho de este país, aquí estamos con camiseta, jersey y cazadora. Una gozada que dicen los que andan sudando la gota gorda por ahí abajo oye. Pues maldita la gracia que me hace a mí tan asqueroso tiempo. El jueves pasado inauguré la temporada de palas y baños en la playa pero me temo que fue sólo un espejismo.

Para colmo me doy cuenta que en esta ciudad cada vez hay más colgados y gente sin ninguna educación ni formación. Sólo tienes que salir a la calle sin ir muy lejos para darte cuenta de ello. El amargado que está cargando en un camión y de la que pasas te deja sordo, la maruja que te sacude encima la mierda que acumula en casa por la ventana, los monstruos cuellicortos que no paran de correr y dar alaridos a tu alrededor al salir de la escuela o la familia desestructurada que habiendo sitio en todo el local, se pegan a ti como una lapa.

Pero muchos me diréis qué coño tiene que ver todo esto con BLACK SABBATH. Pues todo amigos. Es en esos instantes cuando te apetecería poner este pedazo de clásico a todo meter y responderles escupiendo estos temas inmortales.

Es la primera vez que hablo de uno de mis grupos favoritos y eso que ya ha pasado el año. Lo iba a hacer en plenas navidades, que es cuando más me apetece escuchar este disco, pero por causas del destino ha sido hoy. También podía haber esperado a un día de tormenta para ambientar un poco más la cosa o a que empezaran las vacaciones para dar ideas sobre los destinos donde pasarlas. Ir a la búsqueda de esta bendita casa que aparece en la portada es toda una aventura, amén de querer encontrar a la mujer que por lo que cuentan, no estaba en la foto cuando se hizo.

Y es que todo en este disco es perfecto, desde esa mítica portada a esos poderosos y pesados riffs a cargo de nuestro amigo IOMMI con los que abre este pedazo de historia. Este disco selló las bases de lo que iba a ser el heavy metal en todas sus vertientes y a partir de aquí todo cambió. Todo esto y yo aún no había asomado todavía la cabeza en este mundo. Corría el año 70 cuando este álbum veía la luz con uno de los comienzos más aterradores que se recuerden jamás. Mi canción preferida de BLACK SABBATH, "Black Sabbath", la canción sin duda más terrorífica de todos los tiempos y uno de los mejores temas de la historia del rock para quien esto suscribe. Esas 20 campanadas iniciales son el presagio de que nada bueno puede ocurrir. Y en cuanto al querido Madman, todos sabemos que el señor OZZY OSBOURNE no tiene la mejor voz del mundo pero a quién narices le importa eso. Es perfecta para este tipo de temas siniestros y les da todavía más si cabe un aire más apocalíptico.

No voy a ir diseccionando, como otras veces he hecho, tema por tema. Es como una obra conceptual, un todo, donde nada falta ni nada sobra y de obligada escucha de principio a fin para cualquier amante del rock and roll. Y os diré que soy implacable. No entiendo que alguien que dice amar este tipo de música me diga que no le gusta este grupo. Ni lo entiendo ni lo tolero. Es como decir que te gusta el cine pero no JOHN FORD, no tiene sentido y da muestras de por donde van los tiros. Hacedme caso, no os fiéis de alguien al que no le gusten BLACK SABBATH, seguro que os acabará traicionando. Con esto os quiero decir que si realmente alguno está entre este grupo es mejor que no me lo cuente o que mienta como un bellaco para que no cambie mi percepción sobre él. Bueno, o haced lo que os de la gana pero no digáis que no os lo avisé.