Sólo un día después de la muerte de nuestro querido BILLY POWELL, tenemos que lamentar también la pérdida de la legendaria leyenda del folk-blues inglés JOHN MARTIN, entre cuyos más fieles seguidores se encontraba gente como ERIC CLAPTON, LED ZEPPELIN, DAVE GILMOUR o THE BAND, por citar algunos. Aquí os pego la noticia de elpais.com.
Cumplió con la norma básica del artista maldito. John Martyn murió el pasado jueves a una edad impropia, 60 años, por causas no precisadas. Junto a Sandy Denny, Richard Thompson y algún otro, pertenecía al círculo de los renovadores del folk inglés, quienes ensancharon los límites del género llevándolo hasta donde sus antecesores no hubieran soñado. John Martyn era reacio a dejarse ver en demasía aun cuando, en su país, podía reunir una considerable cantidad de público en sus apariciones. Nada se dice de sus actuaciones en nuestro país, donde actuó de tapadillo y en condiciones escasamente higiénicas.
Martyn parecía estar orgulloso de su condición de músico de culto, bien es cierto que podía presumir de tener los mejores amigos. Como Eric Clapton, que le llamó para participar en su disco Slowhands. O Lee Scratch Perry, el errático y no menos extravagante productor de reggae. Martyn y Perry compartieron mesa y mantel en la casa-estudio del jamaicano, de donde resultó la extraordinaria Big Muff (incluida en One World, de 1977).
Lo más cerca que estuvo del éxito fue en el año 1973, con Solid Air, dedicada a su amigo Nick Drave, quien aparecería muerto por sobredosis al año siguiente. Para entonces, Martyn había iniciado su colaboración con el contrabajista de jazz Danny Thompson, quien se convirtió en su acompañante de cámara. Con él desarrolló una forma de cantar alucinada que tomaba su inspiración en el timbre del saxo tenor. Martyn, un formidable y muy personal guitarrista por sí mismo, no fue un cantautor de este mundo, ni por lo que contaba en sus canciones ni por la forma en que lo hacía. Quienes le conocieron aseguran que su divorcio, a finales de los setenta, alteró su débil equilibrio psíquico. Martyn, que nunca siguió una carrera profesional demasiado lineal, "apretó el botón de la autodestrucción". Fruto de ello fue el álbum Grace and danger, que su autor siempre consideró el mejor de su carrera, y su compañía guardó durante un año en el cajón de los "proyectos demasiado perturbadores para ver la luz". En dicho álbum, el cantautor volvió a contar con la ayuda de uno de sus amigos, el baterista y cantante Phil Collins. Su carrera posterior fue un continuo ir y venir entre compañías discográficas motivado, en parte, por su carácter cambiante y sus costumbres no muy saludables.
Convertido en un clásico a su pesar, Martyn acertó a continuar por la línea de la heterodoxia en álbumes como The Church With One Bell (1998) en el que versioneó a Billie Holiday, Elmore James, Ben Harper y Portishead. Para entonces, su salud comenzó a dar las primeras señales de alarma. En el 2003 le fue amputada una pierna a consecuencia de un quiste.
Descanse en paz lo que no pudo hacer en vida.
3 comentarios:
Hemos dado la noticia en conjunto,buen homenaje para el señor Martyn
Obituario oficial PAULAMULE! Un personaje desconocido para mí, pero parece que no para el mundo del rock, que seguro lo lamentará. saludos!
Tsi-na-pah: gracias igualmente. Tuve la intención de ponerlo ayer pero la galbana me pudo y al final coincidimos los dos. Por cierto, mal hecho no ir a verle, ya sabes luego lo que pasa.
Ventiladorcular: efectivamente era un personaje totalmente desconocido para muchísima gente incluso dentro del rock, pero es que todo no se puede abarcar.
Gracias a los dos y salud.
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