Vuelta al hogar

Pues eso, boys and girls, la semana que viene terminará este trajín de ida y vuelta en el que nos hemos metido e instalado gustosamente desde el invierno pasado. La experiencia no ha podido ser más positiva y he dejado parte de mi corazón en uno de los rincones visitados. No sé qué diantres deparará el futuro pero no encuentro el momento de volver a ese lugar y revivir todo lo ocurrido. Quizá no sea igual pero sigo manteniendo la ilusión como una niña y, aunque no deseo que pase el tiempo, ya tengo gana de estar allí de nuevo.

El año pasado me prometí hacer una criba o limpieza en el ordenador y no meterme de lleno en el blog hasta no tenerlo terminado. Pues bien, mi promesa fue una vez más incumplida y no creo que esta vez se dé el caso. O igual sí, quién sabe. Tengo cientos y cientos de favoritos que voy añadiendo por si acaso y que nunca les doy salida. Vivo en mi particular caos pero cuando busco algo suelo encontrarlo tarde o temprano. Así que como no estoy muy al día de novedades musicales y no sé si tendré mucho tiempo de ponerme a hacer críticas de discos al llegar, quizá sea el momento. En fin, ya veremos. De momento, os dejo unos días solos así que no seáis malos y avisadme cuando sea tiempo de rockear de nuevo.